Llevo mucho tiempo sin publicar nada. Espero que todos estéis bien, dadas las circunstancias tan complicadas que nos ha tocado vivir.
Estamos todos bien en casa, pero estos meses han resultado muy estresantes en todos los aspectos, y esto ha hecho que, por un lado, no tuviera muchas ganas de escribir, y, por otro, me faltara el tiempo para ponerme a redactar una entrada.
Pero he decidido no dejarlo más. Aunque las albóndigas son un plato más que conocido en todos los hogares, y en este blog ya hay unas cuantas recetas, como las albóndigas en sobrehúsa, o las albóndigas de carne y arroz, esta salsa les da un toque tan especial que no me resisto a compartirlas con vosotros. Y eso que, por error, perdí unas cuantas fotos del paso a paso, pero creo que no hacen falta demasiadas explicaciones, jajajaja, así que la subiré con las fotos que tengo.
Sin más, voy con la receta. Poco a poco iré subiendo las cosas nuevas que he ido preparando este verano, cuando los "líos varios" me lo han permitido.
INGREDIENTES:
500 gramos de carne picada de ternera, o de ternera y cerdo mezcladas, o también de pollo.
Miga de pan remojada en leche (el equivalente a una rebanada de pan de sandwich sin corteza).
1 diente de ajo picado lo más fino que podamos.
1 cucharadita de perejil picado.
1 cucharadita de sal
Pimienta negra, o "5 pimientas" al gusto.
1 huevo crudo.
Harina para rebozar.
Aceite de oliva virgen extra.
Para la salsa:
1 cebolla grande
2 dientes de ajo.
(Opcional) 1 tomate seco troceado.
Sal
Aceite de oliva virgen extra.
1 vasito (de los de vino) de Pedro Ximénez (u otro vino dulce similar).
1 vaso de caldo de verduras o carne (o de agua con media pastilla de caldo deshecha).
PREPARACIÓN:
En un bol, mezclamos la carne, el ajo, el perejil, la miga de pan bien escurrida, la sal, la pimienta y el huevo. Mezclamos todo bien con las manos.
Dejamos reposar durante media hora, más o menos.
Vamos formando bolitas con las manos, y las pasamos por harina (sin rebozarlas demasiado). Las freímos en abundante aceite bien caliente, escurrimos y reservamos.
Mientras tanto, vamos preparando la salsa. Picamos la cebolla y el ajo (no hace falta que se pique demasiado fino, puesto que después lo trituraremos). Troceamos también el tomate seco, si lo ponemos.
Y lo rehogamos en un chorreón de aceite de oliva, a fuego medio-fuerte, para que vaya tomando color, pero con cuidado de que no se queme.
Cuando haya cogido color y se haya ablandado la cebolla, agregamos el vino, y damos un hervor de 1-2 minutos para que se evapore el alcohol.
Agregamos entonces el caldo o agua, y dejamos reducir unos minutos.
Probamos el punto de sal, y trituramos la salsa (En Thermomix, 20 segundos a velocidad 6-7).
Colocamos las albóndigas en una cazuela baja, cubrimos con la salsa, y dejamos que todo se cocine junto durante 10-15 minutos (si la salsa se redujera mucho, añadimos un poco de agua).
Se puede preparar de un día para otro.
¡A disfrutar!.
Me alegro que os encontréis bien, en este tiempo más que nunca hay que preguntar por la salud.
ResponderEliminarLas albóndigas que nos traes me encantan, lo se porque yo las hago prácticamente igual y quedan perfectas. La salsa para rebañar. Este plato ya te alegra la vida, así que es para tenerlo en cuenta.
Un placer saber de ti. Un beso.
Riquisimas albóndigas, y salsita para mojar mucho pan.
ResponderEliminarMe alegro de que estéis bien, eso es lo importante.
ResponderEliminarEl toque dulce del Pedro Ximénez le queda muy bien a la salsa que acompaña perfectamente a las siempre ricas albóndigas.
Besos.
Unas albóndigas de lujo te han quedado y esa salsita, rica, rica.
ResponderEliminarBesitos guapa
Hola Marga, me alegra verte por aquí con una nueva receta y me alegra también saber que estáis bien, realmente estamos viviendo unos tiempos muy complicados...
ResponderEliminarEn cuando a las albóndigas, pues decirte que disfrutaría mucho con ellas, sobre todo con la salsa tan rica que ha hecho
Abrazos!!
Yo también me he casi obligado a regresar porque sino la desidia y la pereza se instalan cada vez más y no lo voy a permitir mientras pueda y así de paso mantenemos la cabeza ocupada en otras cosas que nos evadan un poco.
ResponderEliminarMe encantan las albóndigas y hace mil años que no las preparo, hay que ponerle remedio rápidamente .
Con esta salsa han de estar de escándalo, con un buen pan para levitar de gusto.
Un abrazo y a seguir cuidándose mucho.
pues las probaré, el toque del pedro ximenez me encanta, y no he usado esta bebida nunca para las albóndigas
ResponderEliminarMe alegro verte de vuelta por aquí y saber que estáis bien. Este año nos cuesta a todos volver a una rutina que no es una en realidad.
ResponderEliminarSuerte que de momento seguimos disfrutando comiendo... Esta salsita tiene su magia, es una pasada y me has recordado que llevaba un buen momento sin preparar albóndigas y es una pena con lo que les gusta en casa!!!
Por cierto, todavía estás a tiempo participar en el sorteo para los 11 años del blog!!!
Cúidate mucho y un abrazo,
Palmira
Me alegra verte por aqui de nuevo, las albondigas con esta salsa quedan muy ricas besitos
ResponderEliminarHola, cocinar con este vino es stodo un acierto, las salsas quedan concentradas y con un sabor absolutamnete delicioso. Mil besos!!
ResponderEliminarMarga me ocurre lo mismo, por uno u otro motivo me da mucha pereza sentarme a redactar y subir recetas, y el caso es que como tú, tengo varias fotos y cocino igualmente, pero lo de sentarme y redactar lo llevo fatal,
ResponderEliminarEstas albóndigas bien merecen el "esfuerzo" porque deben estar sabrosísimas, el PX le da un sabor que me rechifla.
Besos!
Me alegra leerte de vuelta :) Están siendo tiempos convulsos, sin lugar a dudas. Para mi el blog siempre es mi válvula de escape y gracias a la cocina me olvido de todo lo que está ocurriendo :/ Qué ganas de que todo se quede en el recuerdo!
ResponderEliminarCon tus albóndigas me iba a poner las botas mojando pan, ¡qué ricas!
Hola Marga. Me alegro mucho al verte de nuevo y saber que os encontráis perfectamente, cosa que hay que agradecer tal como está la situación que, viendo las medidas de quien nos gobierna, salvo en determinados lugares, parece que seamos el faro que ilumina al resto del planeta en la adopción de medidas, que como se ve no aparecen por ningún lado. Improvisación y parches, esa es su actuación.
ResponderEliminarHablemos de otra cosa porque me descontrolo jj.
Suelo hacer mucho albóndigas ya que no son difíciles de hacer y gustan a todos, aunque siempre puede haber alguna excepción jj.
Con esa salsa en la que las hecho tienen que estar exquisitas. Solo hay que ver el color que tiene para que la boca se haga agua al imaginar su sabor.
Confío en que nos sigamos viendo.
Un abrazo.
Hola, Marga:
ResponderEliminar¡Qué bueno que están bien! Comprendo perfectamente lo que comentas, a mí me está costando mucho también redactar las recetas. Además, como he estado pachucha tocaba arroz o patatas y carne o pescado a la plancha. Así que pocas cosas variadas he cocinado.
Estas albóndigas tuyas al Pedro Ximénez tienen una pinta espectacular y la salsita para mojar pan, ¡Qué maravilla!
Un besito, guapa.
Hola Marga, ante todo me alegro de que todos esteis bien, y espero que poco a poco vaya cediendo tu estrés. En cuanto la receta haces bien en publicarla pues la salsita es diferente por lo menos a las que yo preparo y debe estar deliciosa. Un beso
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